Venid a Mí todos los que os sentís indignos. Yo os espero.

jueves, 21 junio 2012 0:05

Mi querida hija Mis seguidores deben entender que como todo buen padre siempre querré lo mejor para ellos.

Nunca les daré todo lo que pidan si no es de acuerdo con Mi Santísima Voluntad.

Nunca dejaré que se desvíen del camino de la Verdad sin engatusarlos para que vuelvan a Mí.

Siempre intentaré protegerlos de todo mal.

También les castigaré por cualquier fechoría.

Me enfado, y puedo enfadarme, cuando hacen el mal a los demás.

También les perdonaré cuando hagan el mal si de verdad se arrepienten del error cometido.

Soy paciente. No me escandalizo fácilmente y nunca, ni podría, guardar rencor.

Por eso, incluso aquellos que se han extraviado y que se sienten vacíos por dentro deben pedirme que les abrace, les ame y les traiga el Amor Divino que les traerá la verdadera paz.

Mucha gente está perdida y se ha olvidado de Mí.

Muchos, debido a las vidas pecaminosas que han llevado, son reacios a acudir a Mí. Se sienten incómodos, no saben cómo rezar y creen, erróneamente, que es demasiado tarde para ellos. Qué equivocados están. No deben olvidar nunca que Yo ofrecí Mi vida en la tierra por cada uno de vosotros.

No abandono a las almas tan fácilmente. Amo a todos aquellos que, con sus acciones, obras y pensamientos, quebrantan las Leyes de Mi Padre.
Vosotros sois preciosos para Mí. Te amo como amo a todos los hijos de Dios.

Nunca creas que se te ama menos porque pecas. El pecado, aunque aborrecible para Mí, es la mancha con la que naciste.

Es casi imposible que un alma en la tierra no peque.

Nunca sientas que nunca podría ayudarte o acogerte en Mis Brazos.

Te pondrás el primero en la fila para entrar en Mi Nuevo Paraíso en la tierra, que durará 1.000 años cuando te vuelvas a Mí.

Lo único que te pido es que hables conmigo con estas palabras

Oración de cruzada (62) Por los pecadores perdidos y desamparados

Oh Jesús ayúdame porque soy un pecador perdido, indefenso y en la oscuridad
Soy débil y me falta el valor para buscarte
Dame la fuerza para llamarte ahora para que pueda romper con la oscuridad dentro de mi alma.

Llévame a Tu luz Querido Jesús, perdóname
Ayúdame a ser completo otra vez y guíame a Tu
Amor, paz y Vida Eterna.
Confío en Ti completamente y Te pido que me tomes en mente, cuerpo y alma mientras me rindo a Tu Divina Misericordia.

Amén.

Venid a Mí todos los que os sentís indignos. Os estoy esperando. Todo lo que se necesita es extender la mano y llegar a Mí.

Escucho. Veo. Lloro. Te quiero.

Nunca me rendiré hasta que estés en Mis Brazos y Mi Divina Misericordia inunde tu alma.

Pronto verás por fin la Verdad de Mi Gran Misericordia
Tus dudas caerán como una cáscara exterior para revelar tu alma que se llenará de la luz y vendrás corriendo hacia Mí.
Espero ese día con gran esperanza y alegría.
Sólo cuando cada pobre alma perdida sepa que sólo Yo, Jesucristo, puedo salvarla, Mi Corazón será sanado.
Recuerda que puedo condenar el pecado pero amo a cada pecador sin importar lo que hayan hecho.
Nunca tengas miedo de venir a Mí, de hablar Conmigo, porque te amo demasiado como para rechazarte cuando muestras verdadero remordimiento.
Tu amado Jesús

El hombre no evolucionó a partir de los animales, pero eso es lo que quieren hacer creer los que no creen en Dios.

jueves, 21 junio 2012 17:30

Mi querida y amada hija desde que el tiempo comenzó y cuando el mundo fue creado por Mi Padre Eterno ha habido mucha confusión sobre el origen de la raza humana.

Cuando Mi Padre creó el mundo para poder tener una familia se hicieron muchos preparativos.

Creó la tierra, los mares, las plantas, los árboles, las montañas, los ríos, los animales y luego, en el penúltimo día, cuando todo estaba en su lugar en el Paraíso, creó al hombre.

El hombre no evolucionó a partir de los animales, pero eso es lo que quieren hacer creer los que no creen en Dios.

Las teorías de la evolución, que afirman que el hombre procede de los animales, son mentira. Nunca podrán demostrarse.

Satanás, sus ángeles caídos y todos los demonios que surgen del enemigo de Dios, han convencido al hombre de esta terrible mentira.

El hombre es hijo de Dios, pero para degradar al hijo humano de Dios, Satanás quiere crear confusión en los corazones de la humanidad.

¿Por qué promueve esta mentira a través de enseñanzas falsas? Para poder probar que el hombre evoluciono de los simios y luego convencerlos de que no fueron creados por la Mano de Mi Padre Eterno.

Esta es una de las mayores mentiras perpetradas por el diablo utilizando las almas de aquellos hombres que pretenden ser más inteligentes que el resto de sus hermanos y hermanas.

Los cientificos declaran que el hombre evoluciono del animal pero estan siendo engañados.

La ciencia es defectuosa cuando intenta declarar la verdad sobre la creación del universo.

Ningún hombre comprende el milagro de la Creación Divina.

Si el hombre cree conocer todas las respuestas sobre los orígenes de la humanidad, basándose en el razonamiento humano, no sólo engaña a otras pobres almas, sino a sí mismo.

Cuando no hay amor a Dios en esas almas que creen en la superioridad de la inteligencia humana, el ateísmo se extiende como la mala hierba.

Esta mala hierba, que crece en todas direcciones, contamina y destruye todos los cultivos a la vista y crea enfermedades.

La única cura es buscar la ayuda de Dios a través de la oración humilde y pedir que la Verdad sea revelada.

Tantas falsedades difundidas por los ateos, que intentan demostrar que Dios no existe, han destruido millones de almas. Sus víctimas necesitan tus oraciones.

El ateísmo es la mayor religión del mundo y los que han dedicado su vida a este engaño están perdidos para la eternidad.

Se enfrentarán a las llamas del Infierno.

A menos que se vuelvan a Mí, durante o después de La Advertencia, sufrirán un terrible castigo.

Reza por ellos.

Tu Jesús

La mayor mentira es que Satanás puede predecir el futuro, pero esto nunca puede ser

viernes, 21 junio 2013 11:50

Mi querida y amada hija, a medida que el paganismo continúa extendiéndose como un virus por todo el mundo, el hombre comienza a erigirse en Dios. Muchas sectas que no aceptan la Existencia del Dios Verdadero, honran en cambio a la bestia en sus templos. Estas pobres almas, cuyo amor a sí mismas, que brota de una ambición feroz, han erigido templos, que honran descaradamente a Satanás. Para muchos forasteros, estos templos parecen iglesias, que honran a Dios, pero no se dejen engañar. Su único propósito es adorar a la bestia, que les promete la vida eterna. Les promete que si rinden homenaje a su amor al yo, que sustituye al amor a Dios, obtendrán un paraíso eterno de placer.

Las promesas que les hace la bestia, que se comunica con ellos claramente, están diseñadas para engañarlos y hacerles creer una mentira. Que si se colocan ante el altar de la bestia - el falso dios que adoran en lugar de Mi amado Padre - sus peticiones de placeres mundanos y autogratificación serán recompensadas. Si ellos ponen sus necesidades primero, antes que las de otros, ellos creen que seran empoderados con gran riqueza, control y libertad.

Se anima a estas personas a que se antepongan a Dios y busquen tales poderes que sean capaces de derrotar al Reino Divino de Dios. Lamentablemente, harán lo que sea necesario para lograr su ambición de riqueza y control sobre los demás por pura codicia. Destruirán las vidas de otros. Matarán para lograr sus objetivos y maldecirán a Dios todos los días.

Cuando maldicen a Dios celebran misas negras, muchas de las cuales se celebran en secreto y a las que asisten personas poderosas, incluidos los que dicen servir a Dios en sus iglesias. Sus ceremonias satánicas son habituales y están orgullosos de sus actos. Proclaman con orgullo que sus edificios son templos, pues no tienen vergüenza en sus almas. Estos templos se establecen para rendir homenaje a Satanás, no a Dios, sin embargo, quieren hacer creer lo contrario.

Serán castigados por Mí por sus crímenes contra la humanidad y las profanidades contra Dios, de las que son culpables. Muchos de ellos maldicen a Mi Padre usando términos que son exclusivos de Él. Mi Padre dijo: "Yo Soy el Principio". "Yo soy" es usado para denotar su amor a sí mismos y ellos emularán cada acto santo, hecho y repetirán palabras, que fueron dadas al mundo por Dios, con el fin de profanarlo.

Sus templos serán, durante el Gran Castigo, despedazados por Dios y se volverán estériles y vacíos sin ningún tipo de poder sobre los hijos de Dios. Sin embargo, como a todos los hijos de Dios, se les dará la oportunidad de rechazar a Satanás antes del Gran Día. Algunos aceptarán Mi Mano de Misericordia, pero muchos la rechazarán, porque creen en las mentiras diabólicas, impresas en sus almas por la bestia.

Creen que controlando el mundo, ampliando su conocimiento del universo, controlando la vida alargando la vida humana y mermando la población mundial llegarán a ser como Dios.

Satanás es muy cuidadoso en cuanto a la forma en que captura sus almas. Les muestra grandes visiones del futuro, que les dice que es suyo. Les habla de grandes acontecimientos que tendrán lugar en el futuro y que son suyos. Todo son mentiras. Nada de lo que les dice es verdad. Satanás tiene muchos poderes, que le fueron dados por Dios, como Lucifer, uno de los ángeles más poderosos en la jerarquía de Mi Padre. El muestra a sus seguidores hermosas imagenes de un futuro glorioso, que el dice sera de ellos si entregan sus almas a el. Ellos creen en sus promesas de futuro.

La mentira más grande es que Satanás puede predecir el futuro, pero esto nunca puede ser. La profecía sólo puede venir de Dios. A nadie se le ha legado este Don, que sólo puede brotar de los Labios de Dios. Satanás no puede predecir acontecimientos futuros, cuyos detalles sólo pueden ser dados a los profetas de Dios. Si crees en las promesas de Satanás, tu vida se convierte en una mentira y la Vida Eterna no puede ser tuya, a menos que aceptes la Verdad.

Dios te ha prometido la Vida Eterna. Mi Promesa de volver y llevarte al Paraíso es Cierta. No insultes a Dios rechazando la Verdad.

Tu Jesús

Madre de la Salvación: Para servir verdaderamente a mi Hijo, debes amarlo primero. Para amar a mi Hijo debes conocerlo primero

sábado, 21 junio 2014 15:40

Mi querido hijo, mi propia vida en la Tierra fue vivida a través de mi Hijo, Jesucristo. Mi alma fue creada en el Cielo por mi Padre, Dios Altísimo, y mi nacimiento fue un Regalo extraordinario para la humanidad. Fui enviada por Dios con el único propósito de entregar al mundo al tan esperado Mesías. El nacimiento de mi Hijo fue Milagroso y desde el momento en que Él respiró por primera vez mi único deseo fue servirle en todas sus necesidades.

Yo adoraba a mi Hijo y lo reconocía con gran reverencia. Su hermoso comportamiento piadoso se hizo evidente rápidamente a los tres meses de Su nacimiento. Su sonrisa era radiante e incluso tan joven como era; Sus penetrantes ojos azules tenían una extraordinaria profundidad y madurez. Sabía que estaba allí para servirle en todo, pero me mostró un gran Amor a una edad muy temprana. Este Amor no era sólo el amor que un niño tendría por su madre - era mucho más grande que eso. Me tranquilizaba, me acariciaba la cara cada vez que me preocupaba por los peligros a los que tendríamos que enfrentarnos nosotros y mi esposo, San José.

Después del éxodo a Egipto, me resultaba difícil relajarme y permanecía alerta ante cualquier posible amenaza o peligro, lo que significaba que dormía pocas horas por la noche. Incluso antes de que mi Hijo se diera a conocer, tenía muy claros los peligros que tendría que afrontar en el futuro. Sus Manos, siempre tendidas hacia la gente en amor y amistad. De niño, atraía a muchos, aunque no tenían ni idea de Quién era. También recibió críticas injustificadas de amigos y conocidos. Muchos se burlaban de Él y de mí. La Presencia de Dios atrajo tanto a los buenos como a los de almas oscuras a nuestra pequeña familia desde el día en que nació mi Hijo. Mi amor por Él era muy poderoso. Lo amaba por Quien era, pero también lo amaba como Madre y ese amor continúa hasta el día de hoy.

Yo era algo sobreprotectora con mi Hijo y cuando lo perdí en el viaje de vuelta de Jerusalén me aterroricé. Mi sensación de pérdida se sentía en cada parte de mí y no podía descansar hasta encontrarle. Aquel día, cuando le encontré hablando y predicando a los ancianos en el Templo, comprendí desde aquel momento que sólo tenía que servirle y ser obediente a todos Sus Deseos.

Para servir de verdad a mi Hijo, debes amarle primero. Para amar a mi Hijo, primero debes conocerlo. Conocer a mi Hijo significa estudiar Su Palabra y entender lo que Él dijo a Sus discípulos durante Su Tiempo en la Tierra. Es sólo a través de Su Palabra que puedes llegar a conocer a Jesucristo. Si aceptas Su Santa Palabra, entonces puedes servirle. No puedes servirle si no honras Su Palabra o haces todo lo que El te enseño. La obediencia a la Palabra de Dios es esencial si deseas vivir como un verdadero cristiano. Si predicáis Su Palabra, entonces debéis practicar lo que mi Hijo predicó: amaros los unos a los otros; hacer a los demás lo que esperáis que os hagan a vosotros; honrar a Dios, a través de los Santos Sacramentos, como Él os enseñó.

Nunca debes dictar a Dios tu deseo de cambiar Su Palabra, porque no tienes este derecho. La sumisión a mi Hijo sólo puede lograrse si permaneces obediente a Sus Enseñanzas. Id en paz a amar y servir al Señor.

Tu querida Madre

Madre de la Salvación